En una entrevista que hoy publica el diario "Abc", Blair destaca el "papel vital y valiente" que está jugando en esta crisis el presiente del Gobierno, José María Aznar, puesto que "comprendió desde el principio que Sadam (Husein) y sus armas de destrucción masiva suponían una amenaza real no sólo para Oriente Medio, sino para todo el mundo".

Según el mandatario británico, Aznar ha entendido que la comunidad internacional lanzaría un "mensaje peligroso" a otros "Estados rebeldes" si hubiera permitido que continuase el "desafío" de Sadam Husein a las Naciones Unidas.

Por este motivo, entiende que el presidente español ha adoptao su postura "no para conseguir popularidad a corto plazo, sino porque está convencido de que es lo que más beneficia a España y al mundo en general".

Sobre el desarrollo de la intervención en Iraq, Blair sostiene que el "progreso hasta ahora ha sido muy bueno", aunque reconoce que existe resistencia por parte de las fuerzas que apoyan a Sadam Husein, por lo que puede que "aún nos esperen los días más duros".PAPEL DE LA ONU

Respecto al hecho de que las tropas aliadas todavía no hayan encontrao armas de destrucción masiva en Iraq, afirma que no tiene "absolutamente ninguna duda" de que éstas terminarán apareciendo.

Al mismo tiempo, el primer ministro británico lamenta las víctimas civiles que está causando la ocupación de Iraq, pero señala que las fuerzas aliadas están extremando la precaución para evitar este tipo de daños, mientras que Sadam Husein utiliza a los niños como "escudos humanos" e instala unidades militares en hospitales, escuelas y zonas civiles.

En cuanto a las consecuncias de la intervención militar, niega que España y Gran Bretaña hayan quedado aisladas al decidir apoyar a EEUU en este conflicto, y destaca, respecto a las divisiones en la Unión Europea en este terreno, que Europa "tiene mucho que perder" si permite que estas diferencias continúen.

Por último, Blair alude al papel que, a su juicio, debe tener la ONU una vez que haya sido derrocado Sadam Husein, y manifiesta que los países presentes en el encuentro de las islas Azores (EEUU, Gran Bretaña, España y ortugal) ya señalaron que querían que las Naciones Unidas estén implicadas en la "reconstrucción y la administración" de Iraq.