Cuando se disponía a comenzar su discurso, la ministra fue interrumpida por numerosos asistentes que corearon "No a la guerra" y otros eslóganes contra la intervención militar.

Ante la insistencia de los gritos, con Del Castillo de brazos cruzados y con gesto sonriente, el director general de la Fundación Telefónica, Fernando Villalonga, tuvo que tomar la palabr y pedir al auditorio que se permitiera a la ministra iniciar su intervención, una vez escuchadas las posiciones contrarias a la guerra.

Finalmente, la responsable de Educación pudo comenzar la inauguración del congreso. "Espero que se respete mi derecho a la libertad de expresión", fueron sus primeras palabras.

Desde que se inició el conflicto, Del Castillo ha asistido a varios actos en universidades e instituciones culturales en los que ha tenido que escuchar voces disonantes con la postura delEjecutivo.