IRAK. ZAPATERO PIDE A AZNAR QUE SE OPONGA A UNA RESOLUCION QUE ABRA LAS PUERTAS A LA GUERRA SIN MAS INSPECCIONES

- Rechaza la guerra como mecanismo de desarme por "injusta y desproporcionada" y defiende método pacíficos de presión

- Acusa a Aznar de resquebrajar las líneas maestras de la política exterior de España desde la Transición

MADRID
SERVIMEDIA

El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, pidió hoy al presidente del Gobierno, José María Aznar, que se oponga a la guerra contra Irak y que lo haga incluso si esa posibilidad se abre con una nueva resolución de la ONU que no prolongue el mandato de los inspectores y los medios a su disposición para que traten hasta el último omento de desarmar a Sadam Hussein por métodos pacíficos.

Después de rebatir la posición de Aznar en su intervención ante el pleno del Congreso de los Diputados, José Luis Rodríguez Zapatero expuso la "opción de consenso" del PSOE, que pasa en todo caso por que los inspectores dispongan de todo el tiempo y de todos los medios necesarios para terminar su misión.

"Si no hay una nueva resolución debe haber tiempo y medios para los inspectores, y si hay una nueva resolución, debe incluir tiempo y medos para los inspectores. Le pido que se oponga a la guerra en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Si no hay resolución, usted no puede apoyar la guerra, y, si hay una nueva resolución que en lugar de prolongar las inspecciones el tiempo que sea preciso abre las puertas a un conflicto bélico, usted debe oponerse a ella", sentenció.

El líder socialista argumentó que en momentos de grave crisis internacional como el presente "es cuando la democracia es más necesaria, el diálogo es más necesario qe nunca, y la política de Estado es más necesaria que nunca".

"Es el momento del patriotismo, y patriotismo es mantener la dignidad de un pueblo, es dignidad. Nada hay más antipatriota que la sumisión", dijo.

Rodríguez Zapatero comenzó su intervención reiterando que su posición es fruto de sus más profundas convicciones, que le llevan a condenar la dictadura de Sadam Hussein como otras muchas de otros países "y también la que hemos tenido en nuestro país, pagando, por cierto, un alto precio por elo".

LA DESPROPORCION DE EEUU

Recordó que los socialistas han prestado siempre respaldo al Gobierno en la lucha contra el terrorismo, tanto en España como ante la amenaza internacional, y ha contribuido a fijar los ejes de la política exterior de España, que han sido la defensa de la paz y la seguridad, el respeto por la autoridad de la ONU, y la convicción de que la Unión Europea es "nuestro ámbito natural para la construcción de la paz".

Lo que lleva al PSOE a rechazar esta intervención militr es que la defensa de la seguridad y la paz en el mundo debe estar supeditada a esos principios, "y el ataque preventivo no lo está".

Considera además que esa seguridad y esa paz debe ser preservada por el conjunto de la comunidad internacional, "no por uno sólo, por muy poderoso que sea". Con estas premisas, Rodríguez Zapatero aseguró a Aznar que la actitud del PSOE no es "de oposición a su Gobierno, sino de oposición al uso de la fuerza de una manera injustificada".

Precisó en todo momento queel PSOE comparte la necesidad de desarmar al régimen de Irak, pero discrepa en que la guerra, y más "sin pruebas contundentes de una amenaza inminente", sea el mecanismo adecuado. Por el contrario, cree que se trata de una reacción "desproporcionada e injusta, que comportará males mayores y riesgos muy evidentes".

Rodríguez Zapatero recordó además que ninguna resolución de la ONU contiene el mandato de cambiar el régimen de Irak, ocupar su territorio y masacrar su población. "Ninguno de esos objetivoscuenta con el respaldo de Naciones Unidas", indicó.

Por el contrario, aseguró que tras la Guerra del Golfo las misiones de inspección destruyeron más armas en Irak de las que se destruyeron en la confrontación bélica, y recordó que para lograr ese fin la comunidad internacional dispone "de un inmenso arsenal de persuasión y de vigilancia, que se han demostrado más eficientes y mucho más proporcionados que un ataque militar".

OTRA POLITICA EXTERIOR

Después de rechazar la dostrina de Estados Unidsm Rodríguez Zapatero entró de lleno en la actitud de Aznar, al que acusó de poner en marcha y desde hace tiempo "otra forma de entender las relaciones internacionales y nuestro papel en el mundo", distintos de los que han regido desde la Transición.

Le acusó de haber impulsado una carta con otros siete dirigentes europeos para contrarestar la advertencia de senadores estadounidenses a Bush sobre su aislamiento respecto de Europa, con lo que debilió a la Unión y "puso en cuestión las líneas maestras d nuestra política exterior". "Y encima nos dice que no tenemos sentido de Estado".

A su supuesto ofrecimiento de consenso respondió preguntando "qué tenía de malo el que teníamos", y que pasaba por la actuación prioritaria en el seno de la Unión Europea y el rechazo a acciones unilaterales.

Recordó que a comienzos de la década de los noventa España participaba junto a Francia y Alemania en la construcción europea, "y usted parece que ahora nos quiere llevar a otro sitio, con los euroescépticos, yese movimiento no conviene al interés nacional".

"No puede haber consenso para poner en cuestión lo que ha costado tanto construir. Tendrá que hacerlo como a usted le gusta, sin consenso, pero no se inquiete por mí ni por mi grupo parlamentario, preocúpese de cómo se lo va a explicar a los ciudadanos, porque tampoco están de acuerdo".

Rodríguez Zapatero no perdió la oportunidad de minusvalorar la llamada de Aznar al consenso recordando que ha llamado "oportunistas, rancios y ansiosos de poder" a os que discrepan y ha calificado la palabra libre como "ladrido".

La intervención del líder socialista fue interrumpida con exclamaciones desde los bancos del PP que tuvieron que ser atajadas por la presidenta, Luisa Fernanda Rudi, con la amenaza de expulsar del hemiciclo al autor. Algunos diputados aseguraban después haber oido "cabrón, que se calle".

(SERVIMEDIA)
05 Feb 2003
CLC