El precio de los carburantes es resultado de los precios internacionales de los productos, que a su vez están determinados por el precio de lamateria prima, así como del cambio dólar-euro.

Desde que comenzó el año, el euro se ha mantenido ligeramente por encima del dólar, lo que ha beneficiado a los usuarios europeos, pero las cotizaciones internacionales de los carburantes no han dejado de subir, acelerando aún más desde principios de febrero.

Así, la cotización internacional de la gasolina sin plomo ha subido un 25% entre el 9 de enero y el 7 de febrero, tras pasar de 285 dólares/tonelada a 357 dólares. El 24 de enero, la gasolina si plomo llegó a los 308 dólares, pero la mayor subida tuvo lugar en febrero, ya que el 4 de febrero llegó a los 326 dólares y el día 7 a los 357 dólares.

En cuanto al gasóleo, ha tenido un ascenso más moderado que la gasolina sin plomo, pero aún así de un 17,6% en un mes al pasar de 272 dólares/tonelada el 9 de enero a 320 dólares el 7 de febrero.

Las mencionadas fuentes consideran que, como es habitual, las subidas y bajadas en las cotizaciones de los productos son trasladadas al mercado español on cierto retraso, por lo que, si se mantienen los altos precios del crudo y de los mercados internacionales, las compañías subirán aún más los precios de los carburantes, que ya han subido dos céntimos de euro por litro de media desde últimos de enero.