Según el texto del BNG, el Gobierno tendría que defender que los conflictos entre estados se diriman por la vía del diálogo en el marco de Naciones Unidas.

Además, reclama que el Ejecutivo español no permita el uso de instalaciones militares norteamericanas situadas en España como base para acciones de combate contra otros estados soberanos cuando no cuente, al menos, con el aval de la ONU.

Igualmente, el BNG solicita que se defienda en los foros internacionles una política que conduzca al restablecimiento de las relaciones diplomáticas con Irak sobre la base del respeto a la "integridad territorial, soberanía e independencia" de ese país árabe.

La proposición no de ley sugiere que el Gobierno español trabaje por que se ponga fin a las sanciones que pesan sobre Irak desde la guerra del Golfo, por estar suficientemente demostrado que penalizan gravemente a la población civil.

Vázquez estima que esta demostración de fuerza de la Administración Bush prtende mostrar "al mundo que gobierna el planeta sin ningún tipo de control", despreciando la labor de Nacional Unidas y practicando un "imperialismo puro y duro".

Rercuerda también que el ataque ha sido criticado por varios países europeos, porque Estados Unidos ni siquiera informó a sus aliados de la acción militar con antelación y reclama una actitud crítica por parte del Ejecutivo español.