En un comunicado, Sevilla recordó que ya en el debate de Presupuestos del Estado para el 2003 "los socialistas presentamos una enmienda en la que proponíamos una subida de las pensiones del 2,8%, pero fue rechazada por la mayoría del PP. Ahora hay que corregir esa situación, lo que supondrá un gasto de 856 millones de euros para la Seguridad Social".

Según el dirigente socialista, "si el Gobierno hubiera sido capaz de controlar la inflación, ese gasto adiciona de 856 millones de euros se podría haber destinado a reforzar políticas sociales, como mejorar las pensiones mínimas o atender las situaciones de dependencia".

El secretario de Política Económica hizo también referencia a aquellos colectivos "que no tendrán la misma suerte que los pensionistas, como es el caso de cientos de miles de trabajadores cuyos salarios no contemplan cláusulas de revisión salarial o de los perceptores de prestaciones asistenciales por desempleo, cuyas cuantías están vinculadasa un Salario Mínimo Interprofesional que no se revisa ante las erróneas previsiones de precios del Gobierno".

Por último, señaló que la desviación de los precios en 0,8 supondrá mayores impuestos para los ciudadanos. "El Gobierno se llena la boca de promesas de rebajas fiscales cuando la realidad es que con esta inflación cada vez pagamos más impuestos", concluyó Sevilla.