Hoy mismo, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, reconoció en el Congreso de los Diputados que las arcas públicas eberán destinar más de 2.000 millones de euros a compensar a los pensionistas.

La inflación se situó en octubre en el 4%, y mañana se conocerá el dato correspondiente al mes de noviembre, que es el que se utiliza para fijar la compensación a los pensionistas por la desviación de los precios.

En el caso de que la inflación se mantenga en el 4%, la Seguridad Social deberá destinar a los más de 8 millones de pensionistas 1.100 millones de euros en compensación por la desviación de precios, a los se umarían otros 1.100 millones para consolidar esa desviación en su nómina y garantizarles el mantenimiento del poder adquisitivo.

Cada décima de desviación de la inflación tiene un coste para las arcas de la Seguridad Social de 110 millones de euros, por lo que cualquier variación al alza o a la baja de ese 4% repercutiría en el dinero que debería destinar el Estado a los pensionistas.

Según las estimaciones de los servicios de estudios de BBVA y SCH, la inflación osciló en noviembre entre el 3,8%y el 4,1%, lo que supondría para la Seguridad Social un coste de entre 1.980 y 2.310 millones de euros.

SUBEN LAS PENSIONES

A la revalorización de las pensiones en función del IPC a la que obliga la ley en función del Pacto de Toledo se unirá en 2003 la mejora de las prestaciones acordada por el Ejecutivo con CEOE y Comisiones Obreras.

Al incrementarse la base reguladora de la pensión de viudedad del 46% al 48%, las viudas verán mejorar su prestación un 4,44% adicional a la actualización por lainflación. A esto se une que las viudas menores de 65 años que cobran una pensión mínima ganarán un 1,5% adicional.

Los beneficiarios de pensiones mínimas de jubilación que sean menores de 65 años tendrán una mejora de su prestación un 1,5% pior encima de la que obliga la ley, mientras que quienes perciben el Seguro Obligatorio de Vejez e Invalidez (SOVI) ganarán un 0,5% más.