El INE no ha facilitado todavía los coeficientes de enlace entre el IPC antiguo y el nuevo, como el secretari general de Política Económica, Luis de Guindos, anunció el viernes pasado en rueda de prensa.

Mientras tanto, el descenso de la inflación en una décima en enero carece de su equivalencia en el antiguo IPC, lo que ha sembrado la desconfianza hacia el INE entre los consumidores porque choca con la percepción que tienen de subidas generalizadas por impuestos, precios públicos y redondeos por el euro.

"El INE ha incumplido su obligación de proporcionar instrumentos objetivos de cara al análisis econmico, y en este caso está claro que este índice no sirve, cuando podía perfectamente haberlo calculado. Pero no ha habido la voluntad política de calcularlo y ha habido un serio intento de ocultar la realidad a los ciudadanos", afirmó a Servimedia el portavoz de la UCE, Enrique García.

Para la UCE, "el Gobierno ha tenido la intención manifiesta de enmascarar la realidad". García concluyó que "aquí se pone en juego la credibilidad de un instituto se supone que independiente del Gobierno".

Por su prte, la Confederación de Consumidores y Usuarios (CECU) reiteró que este IPC de enero publicado por el Gobierno "es un IPC falso, que no responde a la realidad", según señaló a Servimedia Antonio López, portavoz de la confederación.

La CECU sostiene que los precios aumentaron en enero cerca de un 1 por ciento y tachó de "irresponsabilidad" la actitud del Gobierno de "no reconocer la realidad" porque ello conlleva importantes perjuicios económicos a los pensionistas. "¿Qué va a pasar en el tema de las ensiones?", preguntó López.