Montoro calificó de "buen dato" la última cifra del IPC y valoró, en rueda de prensa, las últimas medidas antiinflacionistas del Gobierno, como la bajada de precios de la bombona de butano y de los medicamentos.

Asimismo, indicó que el IPC se estabilizará en noviembre, gracias a la bajada de las llamadas telefónicas en el ámbito local y a otras mdidas antiinflacionistas, como el control de las producciones agrícolas.

Igualmente, Montoro afirmó que el Gobierno "hará un esfuerzo" para vigilar la distribución comercial de productos de consumo básico, como el aceite, de manera que los precios de venta al público reflejen la caída de los precios en origen.

Resaltó que esta tendencia a la baja permitirá que la previsión de inflación para el 2000 se mantenga en el 2 por ciento fijado en los Presupuestos Generales del Estado.

El secretario e Estado de Economía hizo especial hincapié en el sector servicios, en el que la inflación descendió del 3,8 por ciento de octubre de 1998 al 3,2 por ciento del mismo mes en 1999.

Montoro indicó que la economía española ha asumido los efectos negativos de la subida del petróleo y de las medidas adoptadas por el Ejecutivo durante este verano para paliar la sequía.

"El IPC mantendrá un perfil de desaceleración, con lo que confirma que la economía está creciendo, creando empleo, y esto es compatiblecon una estabilidad en los precios", apostilló.