"No se puede hacer pagar al comercio los platos rotos del descontrol de la inflación", dijo, para quejarse así de las críticas de algunos miembros del Gobierno sobre los márgenes empresariales y los anuncios de liberalizar más el sector.

Para CiU el problema no s de los comerciantes, sino de la falta de competencia en algunos sectores como el gas, la electricidad, la telefonía local, los transportes públicos, los carburantes o las comisiones bancarias, donde existe "una fijación de precios con carácter prácticamente monopolístico", por el escaso éxito de la liberalización de estos sectores.

Por todo, CiU aseguró que se opondrá a cualquier tipo de liberalización mayor en el sector del comercio, principalmente en lo referido a libertad de precios, ya que Españ ya tiene una situación más favorable en este sentido que el resto de la Unión Europea (UE).