En un comunicado, CEOE advierte del peligro para la competitividad de las empresas de los precios tan altos sobre todo para la exportación, e insiste en que "la contención de los precios es un objetivo imprescindible".

Para los empresarios "de cara al año 2003 se hace necesario el esfuerzo de las empresas, una política de moderación tributaria y la contención salarial para poder mantener y mejorar los niveles actuales de actividad".

Por su parte, la patronal catalana Fomento del Trabajo alertó del riesgo para la creación de empleo y la generación de renta del repunte inflacionista, mientras que la patonal vasca Confebask consideró necesario flexibilizar los mercados de bienes y servicios para mejorar la competitividad y poder bajar los precios.