Pese a la favorable evolución del IPC en998, que creció un 1,4%, CCOO cree que hay que tener en cuenta que la inflación media se ha situado en el 1,8%, debido al repunte que experimentaron los precios en los meses de verano.

A su juicio, parece razonable el cambio de postura de los responsables ministeriales al reconocer que los salarios pueden crecer ahora por encima de los precios. CCOO cree que, "alejado el peligro de alimentar espirales inflacionistas desde la negociación salarial", hay que garantizar un ritmo de crecimiento de los salaios suficiente para aprovechar las posibilidades del crecimiento económico.

Además, la central que lidera Antonio Gutiérrez cree que el Gobierno tiene la obligación de orientar su política económica para ampliar los buenos resultados obtenidos en 1998 a 1999. Para ello, pide al Ejecutivo que desarrolle una política sectorial activa y de reactivación de la inversión pública, con el fin de, como mínimo, mantener el ritmo de generación de empleo.

CCOO exige también al Gobierno que incluya entre los eneficiarios de la bonanza económica a los menos favorecidos, en concreto a los desempleados con cargas familiares y rentas por debajo del salario mínimo interprofesional, "y no sólo a los ciudadanos más ricos que reciben, además, el regalo de una rebaja fiscal regresiva".