Aseguró que la decisión del Banco de España dependerá del dato del Indice de Precios de Consumo (IPC) de agosto especialmente del comportamiento de los servicios.

Precisamente, advirtió que el turismo y la hostelería constituyen el principal riesgo para la evolución de los precios a medio plazo, puesto que no se esperan problemas de la energía, los alimentos y el teléfono.

"El principal problema del futuro, más que un repunte de la inflación, es que no se van a desacelerar los precios", señaló la analista.

Añadió que a medio plazo el auge del consumo privado, debido a la mayor creación de empleo y alaumento de la renta disponible, sí que puede ser otro factor que presione al alza.