Según declaró Martí a Servimedia, la incorporación al régimen de la Seguridad Social de todos los becarios investigadores, desde el primer año, supone un avance.

Sin embargo, a su juicio el Gobierno ha hecho caso omiso de las recomendaciones realizadas en 2005 por la Unión Europea, que otros países, como Alemania, Italia o Lituania, sí han puesto en práctica.

Según explicó Martí, el Estatuto del Personal Investigador en Formación prevé que durante los dos primeros años el becario tendrá Seguridad Social, pero no un contrato laboral, al que sólo accederá en el tercer y cuarto años de su labor investigadora.

FJI-Precarios reivindica que se contrate al becario desde el primer año, ya que con su trabajo hace una aportación a la sociedad y a la empresa.

Además, denuncia que el Estatuto establezca una beca, en vez de un contrato, para los dos primeros años, porque, según Martí, "mientras tienes beca no estás sujeto a las leyes de riesgos laborales" y los investigadores a menudo trabajan en laboratorios en los que tienen contacto con sustancias tóxicas.