La investigación, cuyos resultados han sido publicados en "Cancer Research", concluye quedicha sustancia bloquea una proteína, la NF-kappa B, que hace al tumor resistente a las terapias anticancerígenas, como la quimioterapia.

Aunque el resveratrol está presente en diversos alimentos, su principal fuente es el vino tinto. Este componente actúa protegiendo a la uva del efecto de los hongos. Hace algunos años, los científicos descubrieron ya sus propiedades a la hora de bloquear la inflamación celular, relacionada con enfermedades como la artritis y el cáncer.

El equipo médico, encabezdo por la doctora Holmes, comprobó que la reacción de la célula humana tratada con resveratrol es similar a la que se observó en ratones hace ahora un año. Cuando esta sustancia bloquea la proteína NF-kappa B, las células tumorales son erradicadas con facilidad por la quimioterapia.

Según el profesor John Pezzuto, de la Universidad de Illinois, "descubrir los mecanismos de actuación del resveratrol es vital para desarrollar una terapia preventiva contra el cáncer en humanos". Pezzuto fue el primer invstigador que relacionó esta sustancia con la prevención del cáncer, en 1997.

John Pezzuto forma parte del comité científico de la Fundación para la Investigación del Vino y la Nutrición (FIVIN), que desde 1992 viene divulgando en Europa los beneficios en el organismo del consumo moderado de vino.

Durante un seminario organizado recientemente en Madrid por esta fundación, especialistas de la Universidad de Barcelona prsentaron un estudio según el cual el poder antioxidante no es una propiedad exclsiva del vino tinto, sino que se extiende también al vino blanco y al cava. La investigación, que se llevó a cabo de forma conjunta con la Universidad de California, establece que ese efecto antioxidante radica en la variedad de sustancias fenólicas que contienen dichos productos.