Será, dijo en su discurso, la primera actuación en materia de servicios sociales como derecho pleno de todo ciudadano, y sus destinatarios serán los mayores, los menores, y las personas con discapacidad.

El objetivo del plan, explicó, será prestar atención médica, sanitaria y asistencial, pero también combatir la soledad, incrementar la seguridad y evitar las muertes en codiciones de abandono.

Se pondrá en marcha en cooperación con comunidades autónomas y ayuntamientos, y, además de mejorar las condiciones de vida de millones de personas, vaticinó, generará empleo e integración social.

Además, anunció que el nuevo Gobierno fomentará el empleo de las personas con discapacidad como medio más idóneo para superar los déficits de ciudadanía de este colectivo.