Pérez Touriño se mostró satisfecho por este "esfuerzo inversor sin precedentes", cuya repercusión sobre Galicia es "difícil de evaluar", indicó.

Su mayor preocupación ahora es "la capacidad de ejecutar e invertir" ese dinero, por lo que hizo un llamamiento a los empresarios, a los que pidió ayuda para la ejecución de los proyectos de infraestructuras que se pongan en marcha en esta legislatura.

"Es una inyección de recursos tan potente que la dificultad está en su manejo, no en la propia inyección, que supone 300 millones de euros más de inversión", dijo.

El presidente gallego se refirió también a la posibilidad de propiciar la fusión de las cajas de ahorro gallegas y aseguró que "no forma parte de las prioridades" de su gobierno para esta legislatura.

En cuanto al intento fallido de un grupo de empresarios gallegos de hacerse con el control de Unión Fenosa, Touriño dijo que está por la "galleguización" de las industrias estratégicas que garanticen servicios básicos a la comunidad autónoma.

Touriño hizo estas manifestaciones en presencia de Florentino Pérez, que finalmente se hizo con el paquete accionarial en la eléctrica, y aseguró que ahora sólo le queda "saludar la operación" y esperar un funcionamiento "eficiente" de la nueva dirección de Unión Fenosa.