El destino preferido de los inversores españoles fue América Latina, que absorbió algo más de un billón de pesetas, dato coherente con la circunstancia de que las principales empresas de telecomunicaciones, energéticas y bancarias españolas están realizando grandes planes de expansión e esta área geográfica, aprovechando los planes de privatización en marcha.

En concreto, las empresas españolas pusieron en marcha proyectos por 277.000 millones de pesetas en Chile, por 266.000 millones en Argentina, por 127.000 millones en Colombia y por 95.000 millones en Venezuela.

Las inversiones dirigidas a la Unión Europea evolucionaron de manera más moderada, para totalizar 464.136 millones de pesetas, de los que 149.000 millones se dirigieron hacia Portugal, que se ha convertido con gran iferencia en el país comunitario favorito de los inversores españoles.

Destacan igualmente las inversiones dirigidas a Puerto Rico (215.448 millones de pesetas), Estados Unidos (92.292 millones) y México (47.547 millones). Los paraísos fiscales recibieron 77.715 millones, de los que casi la mitad eligieron como destino el enclave de las Islas Caimán.

BANCA Y ENERGIA

Por lo que se refiere a los sectores destinatarios de las inversiones, el 38 por cien se dirigieron al bancario, un 24 por cien alenergético, un 9 por cien a las telecomunicaciones y un 8 por cien a diversas ramas de las industrias manufactureras (cemento, aceros, vehículos de motor, entre otras).

En cuanto al origen geográfico de las inversiones, casi 1,5 billones partieron de empresas radicadas en Madrid, otros 139.000 millones de Cataluña, 78.000 millones del País Vasco y 74.957 millones de Cantabria.

Las operaciones de inversión verificadas por la Dirección General de Política Comercial e Inversiones Exteriores se instrmentaron sobre todo mediante nuevas tomas de participación en empresas, que supusieron un 48 por cien del total. Otro 45 por cien correspondió a suscripción de ampliaciones de capital de empresa extranjeras.

Los expertos del Ministerio de Economía consideran que "este espectacular incremento de las inversiones españolas en el exterior durante 1997 corrobora la tesis de que la creciente internacionalización de la economía española es un fenómeno de carácter estructural, que no se sustenta únicamente enlas favorables condiciones coyunturales que han acompañado a nuestro sector exterior en los últimos años".

El Ministerio de Economía estima "especialmente significativa la disminución de la inversiones españoles dirigidas a paraisos fiscales (4 por ciento en 1997, frente al 45 por ciento de 1994), hecho que corrobora la conexión entre nuestra inversión directa y la consolidación de nuestros mercados de exportación".

A su juicio, "puede decirse que la economía española posee en la actualidad un setor exterior sólido y consolidado, cuya internacionalización se encuentra garantizada tanto por su presencia comercial como por su actividad inversora".

Para el Ministerio de Economía, "el espectacular crecimiento de la inversión española en el exterior durante 1997 constituye, por lo tanto, una buena prueba de la liberalización externa experimentada por la economía española y de nuestra inserción en el actual proceso de globalización de la economía mundial, así como una garantía de continuidad en el recimiento de nuestras exportaciones".