Según informó hoy la Jefatura Superior de Policía de Madrid, los traficantes distribuían la droga en centros de ocio y diversión en la localidad madrileña de Alcalá de Henares y su entorno.

Es la primera vez que la policía de Bolivia y la española realizan unidas una entrega controlada de drogas, y el Ministerio del Interior considera de gran importancia que se haya abierto esta importante vía de colaboración policial para luchar contra las redes de narcotráfico que introducen drogas en el continente europeo.

El origen de la investigación está en Bolivia, ya que agentes de aquel país detectaron un importante número de envíos de paquetes a España que levantaron sus sospechas. Una inspección permitió comprobar que el paquete sospechoso contenía cocaína, pero continuaron con la investigación para desarticular el grupo que se ocupaba de enviar droga al continente europeo.

La pasada semana se recibió una petición de la policía boliviana en la que solicitaban la entrega vigilada de un paquete que contenía colchones y ropa de cama para bebés que ocultaban dos kilos y medio de cocaína. El paquete venía remitido a través de una compañía boliviana, ajena al grupo delictivo y con sucursal en España, para que lo recogiera un destinatario.