INTENSOS CONTROLES POLICIALES EN UNA DE LAS ZONS DE MADRID MAS CASTIGADAS POR EL TERRORISMO
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Las fuerzas de seguridad del Estado han mantenido instalados durante los últimos días varios controles policiales en zonas del suroeste de Madrid especialmente castigadas por el terrorismo y en las que existen colonias de viviendas militares, como Aluche y Cuatro Vientos.
Este último fin de semana los vecinos se vieron sorprendidos por la intensa presencia policial existente en uno y otro barrio, en especial en la calle Duqesa de Parcent. También hubo controles en el paseo de la Ermita del Santo.
Los agentes, que mantuvieron el dispositivo mañana y tarde, pararon tanto a coches como a viandantes, a quienes exigieron la documentación.
Fuentes del Ministerio del Interior indicaron a Servimedia que tienen por costumbre no facilitar información sobre las medidas de seguridad que establecen en las calles. Se desconoce por tanto si los controles están destinados a prevenir actos terroristas o se trata de una acción contr la delincuencia común.
OBJETIVO DE ETA
Los barrios madrileños de Aluche y Cuatro Vientos han sido durante los últimos meses objetivo preferente de los terroristas de la banda ETA.
El 5 de junio del año pasado fue asesinado en la calle General Romero Basart, en Cuatro Vientos, el teniente del Ejército del Aire Enrique Aguilar Prieto, de 52 años, al estallar una bomba colocada en su coche. En el mismo atentado resultaron heridas varias niñas que se dirigían al colegio.
El 17 de octubre ETA izo estallar tres coches-bomba en la capital, dos de ellos en el barrio de Aluche. En el primero, perpetrado en la calle Duquesa de Parcent, murió el teniente del Ejército de Tierra Francisco Carballar Muñoz, de 47 años.
Media hora más tarde y en la calle Camarena, a unos 200 metros del lugar del primer atentado, hizo explosión otra bomba colocada en el vehículo de María Jesús González Gutiérrez, de 40 años, auxiliar administrativa destinada en el servicio de la oficina del DNI de la comisaría de Cármnes. La mujer, al igual que su hija, Irene Villa González, de 13 años, sufrió amputación de varios miembros.
Tras estos atentados, los vecinos de la zona de Aluche se manifestaron por las calles del barrio en protesta contra el terrorismo.
Otras zonas del suroeste de Madrid, como el paseo de la Ermita del Santo, donde este fin de semana hubo también controles, han sido igualmente escenario de varios atentados.
(SERVIMEDIA)
06 Abr 1992