INSPECTORES DE TRABAJO Y SINDICATOS DENUNCIAN LA "PASIVIDAD" DEL GOBIERNO CON EL DESPIDO NAVIDEÑO Y DICEN QUE ES FACIL ATAJARLO
- Afectó a más de 300.000 trabajadores en diciembre pasado, algunos de ellos con contrato fijo
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Los inspectores de Trabajo y los sindicatos CCOO y UGT han denunciado la "pasividad" del Gobierno para atajar una práctica empresarial que se repite año a año y que consiste en que los patronos dan de baja a los trabajadores en la époc de Navidad y los contratan nuevamente en enero.
El conocido como "despido Navideño" ahorra así a los empresarios el pago de salarios y cuotas a la Seguridad Social, mientras que perjudica gravemente al trabajador en cuanto a cotizaciones y capacidad para recibir prestaciones públicas. En diciembre pasado se registraron más de 300.000 despidos de este tipo.
El presidente de la Asociación de Profesionales de la Inspección de Trabajo, Carlos Moyano, dijo a Servimedia que se podría detectar "fácilmete" a los empresarios que cometen este fraude y se les podría obligar a abonar las cuotas dejadas de pagar, además de imponerles sanciones.
"El problema es que si la práctica no se reprime funciona con facilidad, ya que afecta a los trabajadores precarios, que no se plantean ni acudir al juzgado a denunciarlo ni a nada, y al garantizarle el empresario que le contratará de nuevo, pues no se queja", explicó.
Es algo "ilegal" y "muy significativo", sostuvo el responsable de la asociación de Inspectoes de Trabajo, para quien, "si el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales quiere, lo tiene muy fácil para poner fin a esta práctica, porque es muy sencillo detectarla".
"Bastaría con pedir a la Tesorería de la Seguridad Social el listado de trabajadores que fueron dados de baja y que ahora se dan de alta y trasladarlo a las delegaciones provinciales de la Inspección de Trabajo", dijo Moyano.
TAMBIEN FIJO
Por su parte, el secretario de Empleo de UGT, Jesús Pérez, denunció la "ilegalidad" que coeten los empresarios y afirmó que esta práctica afecta incluso a los trabajadores fijos, que también son expulsados y vueltos a contratar.
"El problema es de los empresarios, que incumplen la legalidad, y del Gobierno, que no tiene voluntad política para perseguirlos con más inspectores de Trabajo. Es un asunto de policía laboral, de más inspección y de pasividad del Ministerio de Trabajo", manifestó a Servimedia.
Además, alertó de los problemas que estas prácticas acarrean para los trabajadores ue, en ocasiones, se encuentran con que no tienen días suficientes cotizados a la Seguridad Social para acceder a prestaciones de desempleo, incapacidad e incluso a sus pensiones.
TRABAJO PUEDE
Por su parte, la secretaria confederal de Empleo de CCOO, Lola Liceras, reclamó al Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales que ataje, porque puede hacerlo, esta práctica "cada vez más común" de despedir en vacaciones.
A juicio de CCOO, "es muy probable que haya irregularidades y fraude por el encadenaminto de contratos temporales" y recordó que el uso de estos contratos debe hacerse sólo ante unas causas productivas determinadas.
(SERVIMEDIA)
11 Ene 2004
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