En una nota de prensa, Rumí recordó que el PP justificó la reforma de la anterior Ley de Extranjería por su supuesto efecto llamada, y añadió que ahora, una vez transcurridos cinco meses de vigencia de la actual ley, "las entradas legales no han hecho más que multiplicarse y son muy superiores a lo que eran hace un año".

"El Gobierno se ha mostrado incapaz de canalizar mínimamente los flujos migratorios que se dirigen a nuestro país y le corresponde en exclusiva la responsabilidad de haber impuesto una reforma que ya se ha demostrado un auténtico fiasco", sentenció.

La dirigente socialista denunció el caso que han supuesto los anuncios de nuevas regularizaciones. "Durante meses, desde la Delegación del Gobierno para la Inmgración, se ha proclamado que no se abrirán nuevas regularizaciones y en la actualidad se están llevando a cabo de manera simultánea, hasta cinco procesos de regularización basándose en cinco criterios distintos para acceder al permiso de residencia. Realmente es difícil actuar de manera más desafortunada y confusa".

"Los errores, las inconsecuencias y las ocurrencias", prosiguió, "no han hecho más que agudizarse por parte de un gobierno que repetidamente se ha negado a aceptar la mano tendida del PSO para hacer realidad un consenso político sobre inmigración, que siente las bases de una política a la altura de las responsabilidades de un país como España", concluyó.