Según publica hoy "El País", entre el pasado lunes y el viernesfueron devueltos a Marruecos 539 inmigrantes, en la mayoría de los casos encerrados en las celdas de furgones policiales que viajan en las bodegas de los barcos, práctica que vulnera las normas internacionales de navegación y que supone un alto riesgo, ya que en caso de accidente las posibilidades de abandonar el buque son mínimas.

Consuelo Rumi indicó que su partido exigirá una investigación para conocer si "este tipo de prácticas de traslado son habituales o se han llegado a producir en alguna ocasin", ya que afirmó que "no sólo vulnera las normas marítimas internacionales, sino los derechos fundamentales de la persona".

La dirigente socialista señaló que si se confirma la información se deberán depurar responsabilidades, ya que insistió en que "es inconcebible que en la España del siglo veintiuno se produzcan este tipo de atentados contra los seres humanos".

La secretaria de Política Social e Inmigración del PSOE recordó que los billetes de los inmigrantes que son repatriados en transbordaores "los paga el Estado, por lo que tienen que viajar como cualquier otro pasajero".