Esta es la respuesta que dio el portavoz parlamentario del PSOE, Jesús Caldera, al ser preguntado en rueda de prensa por los objetivos expuestos por el nuevo delegado del Gobierno para la Inmigración.

Caldera consideró probado que el Ejecutivo está "desbordado", ha perdido toda eficacia en la gestión de la inmigración, y ha comprobado además la falsedad de su promesa de eliminación del "efecto llamad".

Junto a todo ello, el portavoz socialista criticó la "política de dispersión" de inmigrantes emprendida por el Gobierno y la ausencia de toda canalización de los permisos, que está llevando a muchos empresarios a no poder contratar de forma legal la mano de obra que necesitan.

En definitiva, culpó al Gobierno de seguir "dando palos de ciego" en todo lo referente a la inmigración, y reiteró por ello la necesidad de sustituir la actual normativa por otra que concite medidas de control de fronters, de regulación e integración de los inmigrantes que pueden ser absorbidos por España, y de ayuda a todos los que llegan a nuestro país.