Por ello, Caldera anunció, en rueda de prensa, que sugrupo parlamentario ha pedido la comparecencia del ministro del Interior, Mariano Rajoy, para que explique por qué la subdelegación de Cuenca no impidió esta movilización.

Caldera afirmó que no puede haber ninguna manifestación con objetivos que vayan contra la Constitución y contra las leyes y en este caso esa manifestación va contra el principio de no discriminación.

Además, el portavoz parlamentario socialista argumentó que esa protesta se tenía que haber prohibido porque hay otros derechos qu proteger como el de la libertad, el de la igualdad y el de la seguridad pública.

Finalmente, Caldera consideró importante alcanzar criterios en la jurisprudencia para que manifestaciones "racistas, xenófobas y discriminatorias como esta no puedan tener lugar nunca en ningún espacio público en España".