El presidente de ATIME, Mustafá Mrabet, declaró a Servimedia que "los datos del CIS no nos sorprenden, porque ya veníamos avisndo sobre la imprudencia de determinado discurso político y sus efectos colaterales".

Concretamente, Mrabet hizo referencia a los datos que el Gobierno ha ofrecido en varias ocasiones, incluso en el Congreso, según los cuales el 79% de las personas que ingresaron en prisión en los primeros meses de 2002 son inmigrantes.

En este sentido, lamentó la "falta de prudencia" del Gobierno al manejar esos datos. A su juicio, el Ejecutivo ha contribuido a generar en la opinión pública un criterio negativo nte la inmigración, con unos datos que, además, "son erróneos".

El presidente de ATIME advirtió sobre el alto porcentaje de españoles que vinculan la inmigración con la delincuencia, porque, según dijo, esa mentalidad abarca todo el espectro político, desde la ultraderecha hasta la izquierda.

Finalmente, Mrabet exigió al Gobierno un cambio en su discurso para que la imagen de los inmigrantes se corresponda con la realidad.

Por su parte, el portavoz de SOS Racismo, Diego Lorente, calificó de grave" que una mayoría de españoles vincule inmigración y delincuencia, "sobre todo porque es falso, una mentira y una injusticia".

Tras acusar al Gobierno de ser responsable de que los ciudadanos tengan esa opinión de los inmigrantes, Lorente exigió al Ejecutivo "que haga todo lo posible para convencer a la opinión pública de que es falsa la vinculación de inmigración con delincuencia".

Lorente anunció que SOS Racismo está estudiando de qué manera se puede actuar judicialmente contra los discurss del Gobierno en los que a su juicio se vincula la inmigración con la delincuencia y la inseguridad.