Según informó a Servimedia uno de los afectados, José Manuel Rodríguez, un minusválido que utiliza los autobuses de dicha línea iariamente para acudir a su trabajo, ya que no puede acceder al Metro, las acciones de protesta comenzarán esta noche con una concentración que tendrá lugar sobre las once de la noche en la glorieta de San Bernardo, coincidiendo con la salida del último vehículo del día.

Allí, algunos de los viajeros realizarán una "toma" simbólica del último autobús de la M-7 para completar en él el trayecto, mientras que el resto recorrerá el mismo itinerario en coches particulares que formarán una caravana.

Elacto, al que han sido conovocados todos los usuarios habituales de esa línea, concluirá en la última parada situada en el Parque San Juan Bautista, donde los viajeros explicarán a los ciudadanos los motivos para su oposición a la supresión de ese servicio.

No obstante, los afectados están dispuestos a realizar otras acciones de protesta si con ésta no consiguen que el Consorcio reconsidere su decisión.

Rodríguez explicó que ese organismo les indicó que la razón para la supresión de la M-7 es su "ipercoincidencia" con otras líneas, como la 21 o el 53, "pero hay otros itinerarios que también hipercoinciden en el paseo de la Castellana, Velázquez o Serrano y por eso no los quitan", afirmó.

Añadió que además, según datos del propio Consorcio, los autobuses de esta línea, que son 11 diarios, transportan al día unos 14.000 viajeros, por lo que, a su juicio, "no van precisamente desocupados".

Finalmente, mostró su contrariedad por el hecho de que el presidente de ese organismo, Fidel Angulo, nohaya tenido en cuenta las 3.000 firmas que le entregaron los viajeros en protesta por la supresión de la M-7.