El índice interanual de precios ( de junio del 90 a junio del 91) se situó en el 6,2 por ciento, mientras que la inflación subyaciente, es decir, sin contabilizar los precios de la energía y de los alimentos no elaborados quedó en el 7,3 por cien.

Por sectores, el mayor incremento fue el registrado en el menaje y la cultura, cuyos precios crecieron una media del 0,5 por ciento.

Otras áreas como la vivienda, los servicios médicos y el transporte registaron un aumento del 0,3 porcien, mientras que el menor movimiento fue en alimentos y vestido, en que se elevaron 0,2 puntos.

Las regiones españolas con un mejor comportamiento de los precios fueron Canarias y Baleares, con un descenso del 0,1 por ciento, mientras que los mayores incrementos se produjeron en las comunidades de La Rioja y Navarra, con ascensos del 0,9 por cien.

La evolución de precios en el resto de las regiones fue la siguiente: Extremadura (0,7 por ciento), Castilla y León y Murcia (0,6 por cien, cada una) País Vasco (0,5), Asturias, Cataluña y Castilla-La Mancha (0,4), Cantabria y Valencia (0,3), Andalucía y Aragón (0,2) y en Galicia y Madrid los precios se mantienen.

VALORACIONES

Para el Ministerio de Economía calificó la tasa de IPC registrada en junio como "moderada" y aseguró que permite mantener "las espectativas sobre un descenso de la inflación en el segundo semestre del año".

Los responsables de Economía también se mostraron optimistas sobre las posibilidades de acabar el año con un índce de precios subyacente y una tasa anual más baja que la del año pasado.

Por su parte, los responsables de Acción Sindical de UGT y CCOO, Apolinar Rodríguez y Agustín Moreno, respectivamente, señalaron que "el IPC de junio refleja el estancamiento de la política económica y su incapacidad para reducir la inflación".