Fuentes de la comisaría de Santiago informaron que dos individuos, uno de ellos de raza negra, intentaron secuestrar a Juan Queiro abalanzándose sobre él cuando se diponía a abrir la puerta de su garaje.

Bajo la amenaza de una pistola, Juan Queiro fue obligado a entrar en su propio coche, después de haber sido golpeado con el arma. En el momento en que uno de sus agresores le tapaba la boca, el industrial le propinó un mordisco y logró zafarse de la presión y pedir ayuda a gritos.

Al percatarse de lo que ocurría, su esposa y varios vecinos avisaron a la policía. Los dos agresores su dieron a la fuga, no sin que antes la esposa del industrial pudiera reconoceral hombre de raza blanca, ya que la misma tarde había estado en la empresa que la familia tiene en el polígono del Tambre preguntando por Juan Queiro, y ella misma le explicó que estaba de viaje y que no regresaría hasta medianoche.

Cuando una dotación policial acudió al lugar donde ocurrió el frustrado secuestro aparecieron las dos personas detenidas, que según la versión policial acudían para apoyar a los dos que huyeron.

En el lugar de los hechos la policía intervino un turismo Renault 25 de mtrícula portuguesa, en el que la policía encontró un frasco con éter y ampollas de somníferos, así como agujas hipodérmicas y una bolsa de algodón, todos ellos efectos destinados a dormir a la víctima para llevar a cabo con mayor facilidad un secuestro en el que fuentes de la investigación sólo ven motivos económicos.

Las fuerzas de seguridad buscan al también súbdito portugués Jaime José D.S., así como a otra persona, de la que la comisaría asegura disponer de datos que conducirán a su identificaciónen las próximas horas.