Los nuevos precios máximos serán, por tanto, de 89,4 pesetas para la "super", 86 para la normal y 87,1 para la sin plomo. El margen de subida con que contará Campsa, aunque presumiblemente no lo agotará, es de 4,4, 5 y 5,1 pesetas, respectivamente.

Por contra, los gasóleos volverán a registrar nuevas bajadas. Sus precios máximos serán de 68,1 pesetas para el de automoción, 42 pesetas para el de calefacción en suministros de estación de servicio, y 39,2 para este mismo tipo de gasóleo en cantdades superiores a 3.500 litros.

En consecuencia, las bajadas serán de un mínimo de 2,4 pesetas para los gasóleos de automoción y de 4 para el de calefacción, tanto en pequeños suministros como a granel.

El Ministerio de Industria fija quincenalmente los precios máximos de los carburantes en función de las cotizaciones registradas en los mercados internacionales de Rotterdam y Génova y de los precios de venta en seis países comunitarios de referencia.

Fuentes de este departamento consultadaspor Servimedia indicaron que la dispar evolución de los precios de las gasolinas y los gasóleos responde a la caída de la demanda de este último tipo de carburantes, mientras que se mantiene el de las primeras.