Después de ganar con rotundidad las últimas tres ediciones de la vuelta ciclista más importante del calendario internacional, el corredor navarro afronta la vuelta a Francia como favorito, pero no de una forma tan clara como en años anteriores.

Su derrota en el último Giro de Italia, dond quedó tercero después de haber conseguido ganar las dos ediciones anteriores, otorgan a la ronda francesa una emoción 'a priori' de la que carecía las anteriores ediciones, en las que se presuponía que la superioridad de Induráin iba a ser, como siempre, arrolladora.

Veintiún equipos de ocho países (Francia, Italia, España, Bélgica, Holanda, Alemania, Estados Unidos y Andorra) tomarán la salida en Lille, al norte de Francia, casi en la frontera con Bélgica. El tortuoso camino conducirá a los ciclista hasta la capital parisina, pasando por Inglaterra, Normandía, los Pirineos y los Alpes.

Los organizadores han trazado un recorrido que aumentará la competitividad y la dureza para los corredores, en un intento más de que Induráin no consiga su cuarto Tour consecutivo, o al menos que no lo haga con tanta facilidad (el año pasado sacó una diferencia de 5 minutos al segundo clasificado, Tony Rominger, y el anterior cuatro minutos y medio a Claudio Chiapucci).

Sin embargo, el trazado también servirápara promocionar el recién construido Eurotúnel, en cuya terminal francesa acabará la tercera etapa para después celebrar dos tramos en Inglaterra, o para conmemorar el 50 aniversario del desembarco de Normandía, con una etapa que partiendo de Cherburgo prevé su paso por Sainte-Mare-Eglise y por la famosa playa de Utah.

En lo estrictamente deportivo, el Tour tendrá su periodo más duro y decisivo en la última semana. Del 18 al 24 de julio, una vez que el Mundial de Fútbol ya ha acabado y la ronda gala e convertirá en el indiscutible único punto de mira deportivo internacional, los ciclistas tendrán que afrontar cuatro etapas de alta montaña en los Alpes, tres de ellas con llegada en alto, y una cronoescalada, que dejará definida la clasificación final, a falta sólo del 'sprint' de París.

CUATRO ETAPAS CONTRARRELOJ

Si esta cronoescalada alpina de 45 kilómetros entre Cluses y Avoriaz será definitiva para la clasificación general, también serán muy decisivas para el trascurso de la carrera las otrastres etapas contrarreloj, la especialidad de Induráin. Primero será la etapa prólogo en Lille, una contrarreloj corta de 7 kilómetros.

Después vendrá la contrarreloj por equipos (que no suele beneficiar al Banesto) entre Calais y el Eurotúnel, de 62 kilómetros, y la única que realmente viene bien a las condiciones de Induráin: la novena etapa (11 de julio), entre Perigoux y Bergerac, una contrarreloj individual llana de 62 kilómetros.

Las cuatro etapas contrarreloj están repartidas a lo largo de a carrera, lo que no ocurre con las etapas de montaña, que se agolpan al final del Tour. Hasta la decimoprimera etapa, cuando se llega a los Pirineos, no habrá ningún puerto digno de mención. Será el 15 de julio, en la etapa entre Cahors y Lourdes. La siguiente etapa, con un día de descanso en medio, tendrá su final en la ascensión al ya clásico Luz Ardiden, tras haber subido otros tres puertos de categorías segunda, primera y especial.

Después vendrán tres duras etapas alpinas seguidas: las subida alMont Ventoux, la etapa reina con la ascensión a L'Alpe d'Huez y la llegada al puerto de Val-Thorens, los días 18, 19 y 20 de julio, respectivamente. Tras una etapa de transición entre Moutiers y Cluses, restará otra etapa de alta montaña, la cronoescalada y finalmente la llegada a París desde Eurodisney.

A pesar de este trazado 'anti-Induráin', el corredor navarro parte una vez más como favorito para alcanzar el triunfo. Estará arropado por un equipo que tras su fusión con el Amaya fue calificado de 'uperBanesto', pero que en su última participación en el Giro de Italia dejó bastante sólo a su líder en los momentos difíciles. Mikel Zarrabeitia y Julián Gorospe serán los mejores gregarios de Induráin, en un equipo en el que se echará de menos la garra de Pedro Delgado.

Ante el campeón navarro estará como principal alternativa el corredor suizo Tony Rominger, del equipo hispano-italiano Mapei Clas. El ganador de las tres últimas vueltas ciclistas a España (la última con siete victorias de etapa) ya uedó segundo en la edición de la ronda gala del año pasado y este año ha demostrado estar en un excelente estado de forma, a pesar de tener ya 33 años. Contará con la colaboración de Federico Etxabe, Abraham Olano y Jon Unzaga, entre otros.

EQUIPOS ESPAÑOLES

En el Tour'94 participarán, además de Banesto, otros dos equipos españoles: ONCE y Kelme. El equipo que patrocina la organización de ciegos cuenta con un puñado de estrellas, todos extranjeros, liderados por el joven suizo Alex Zülle, que se enfenta seriamente por primera vez a un Tour. Sin duda, Oliverio Rincón, Erik Breukink, Laurent Jalabert y Laurent Dufaux también se dejarán ver en algunas etapas.

El Kelme, por su parte, estará liderado por el veterano Laudelino Cubino, que está haciendo una buena temporada, y contará con la ayuda del grupo de escaladores colombianos que han recalado en el equipo, como Hernán Buenahora y Yesid Camargo.

En cuanto al resto de corredores del pelotón internacional que cuentan con opciones, hay que tene en cuenta a la revelación del último Giro de Italia, Marco Pantani, y a otras estrellas como Claudio Chiapucci, Armand de las Cuevas, Moreno Argentin, Pável Tonkov, Alvaro Mejía o Gianni Bugno.

Entre los jóvenes que se darán cita en la línea de salida destacan Mikel Zarrabeitia y Marco Pantani, quienes corren su primer Tour después de haber sido las revelaciones de la Vuelta a España y Giro de Italia, respectivamente. Ambos quedaron en segundo lugar en cada una de las grandes rondas.

Sin embargo las ausencias más reseñables son las de la verdadera revelación de la temporada, el jovencísimo ruso Eugeni Berzin, que ha sido capaz de vencer el Giro de Italia, por delante de Induráin; la del tercer clasificado del Tour del año pasado, el polaco Zenon Jaskula, y, sobre todo, la de Pedro Delgado, que ha decidido no correr la carrera privando a gran parte de los aficionados españoles de su carismática presencia.

A partir del sábado se verá si Induráin puede continuar el camino hacia el récord de tous ganados, establecido por tres ciclistas míticos que consiguieron cinco victorias en la ronda francesa: Jacques Anquetil, Eddie Merckx y Bernard Hinault. De momento, ya tiene tres.