No obstante, sin descontar los efectos de calendario, este indicador cayó en abril un 9,6%. Según el destino económico de los bienes, los de consumo cayeron un 12,5% (un -16,7% para los bienes de consumo duradero y un -11,9% para los bienes de consumo no duraderos), un -9,4% para los bienes de equipo, un -9,5% para los bienes intermedios y un -3,6% para la energía.

Descontando los efectos de calendario, estas tasas interanuales cayeron un -0,8% para los bienes de consumo (un - 0,2% para los bienes de consumo duradero y un -1,1% para los bienes de consumo no duradero), un 3,8% para los bienes de equipo, un 0,8% para los bienes intermedios y un 2,9% para la energía.

Por su parte, la tasa media del IPI creció hasta abril un 2,2%. Descontando los efectos de calendario esta tasa media se anotó el mismo crecimiento.