Según dijo a Servimedia el responsable de Medio Ambiente de la Federación de Servicios a la Ciudadanía de CCOO, Francisco Javier Cabezos, siete de estas víctimas eran trabajadores que fallecieron directamente en tareas de extinción.

Dos murieron al estrellarse un helicóptero en Cataluña hace aproximadamente un mes, y cuatro perecieron en el fuego de Horta de Sant Joan (Tarragona). El último fallecido fue el conductor de la motobomba que perdió la vida este jueves en Teruel tras precipitarse por un barranco.

Los tres restantes (uno en Cataluña y dos en Ávila) eran ciudadanos que intentaban apagar el fuego resultante de la quema de rastrojos.

Cada año, según explicó Cabezos, mueren una media de ocho personas por culpa de los incendios forestales, en su mayoría trabajadores.

El Instituto Sindical de Trabajo, Ambiente y Salud de CCOO presentó este mes un informe sobre la "Evolución de los incendios forestales en España y de la situación de los trabajadores de prevención y extinción 2009", en el que alertaba de que en España sólo existe un combatiente para cada 748 hectáreas de superficie forestal.

Según este estudio, cerca de 56.000 personas participan este año en la lucha contra los incendios forestales en España, aunque sólo una de cada cuatro se dedica a las labores de prevención.

Impulsar la creación y estabilización del empleo en el medio rural, garantizar un contingente de profesionales mayor que el actual, adoptar las medidas de salud y seguridad "necesarias" (aumentar los descansos, reducir turnos) y reducir la estacionalidad en estos empleos son algunas de las propuestas del sindicato para mejorar la lucha contra el fuego en el país.