Según informó hoy la Dirección General de la Guardia Civil, en la operación los agentes se han incautado de más de 500 kilogramos de polen de hachís cuando iban a se transportados en el interior de dobles fondos practicados en un camión cisterna. La sustancia procedía de Marruecos y tenía como destino los Países Bajos.

La operación comenzó seis meses atrás cuando la Guardia Civil tuvo conocimiento de la existencia de una red que se dedicaba a la introducción y distribución de este tipo de sustancias en España.

Las investigaciones se centraron sobre una persona con residencia en Irún (Guipúzcoa) que mantenía numerosos contactos con determinadas países africans, presuntamente dedicados a la introducción de importantes cantidades de hachís utilizando para ello remolques-cisternas a los que se les practicaba unas cavidades interiores a modo de "doble fondo" de muy difícil localización.

La Guardia Civil averiguó el traslado de una mercancía por parte de uno de los componentes de la red y logró interceptar un camión procedente de Zaragoza que se disponía a cargar 520 kilogramos de polen de hachís en uno de los dobles fondos practicados. Tras esa intervención s detuvo a 4 personas.

Más adelante, la Guardia Civil registró en Murcia un empresa usada por la red como tapadera, en donde se incautaron otros 7 kilogramos de la misma sustancia, una pistola simulada y diversos moldes y herramientas destinados a la fabricación y manipulación de dobles fondos.

Por último fueron detenidos B.P.R., de 34 años, vecino de Zaragoza, y en Irún a J.A.S, de 63 años y máximo responsable de la operación.