La red, que tenía un centro neurálgico en Barcelona, se dedicaba a la introducción ilegal y posterior distribución de grandes cantidades de tabaco entre los cirucuitos comerciales clandestinos de la península y Reino Unido.

Los detenidos, que pasarán el lunes a disposición judicial, son Emilio U.D., de 33 años, residente en Andorra, cerebro y pincipal aportador de capital para las compras de la organización; y Joan T.A., vecino de Moncada i Reixach (Barcelona), de 47 años, encargado de la logística del transporte.

Tras las investigaciones de varios meses, el SVA, del departamento de Aduanas e Impuestos Especiales de la Agencia Tributaria, tuvo constancia de la entrada del último cargamento de tabaco que los contrabandistas esperaban recibir.

Las pesquisas, intensificadas en los últimos días, permitieron conocer que la mercancía se oculaba en dos contenedores procedentes de Grecia que llegaron a Barcelona por vía marítima.

Alrededor de las cinco de la tarde de ayer, agentes del SVA procedieron en el muelle España del Puerto de Barcelona a la localización y apertura de los contenedores, que contenían 1.950 cajas de tabaco -975.000 cajetillas-, que fueron intervenidas. La mercancía, que estaba dispuesta en paquetes alargados que simulaban ser rollos de papel cartón, tenía como destino una empresa inexistente.

Una hora después, furon detenidos Emilio U.D. y Joan T.A., a la salida de un céntrico restaurante de Tarrasa, lugar donde habían urdido la trama para sacar el tabaco del puerto barcelonés.

Posteriormente, varios funcionarios del SVA se incautaron, en una agencia de transportes de Cornellá de LLobregat, de otras 92.000 cajetillas de tabaco andorrano marca Benson & Hegdes, que la organización pretendía introducir en Inglaterra. En esta ocasión, la mercancía declarada en los documentos, para sortear los controles aduaneros ngleses, era un cargamento de guantes.