IGNACIO RAMONET: "LOS LÍDERES POLÍTICOS MUNDIALES ESTÁN HACIENDO ALGO QUE NI LENIN SE ATREVIÓ A HACER"
- El director de "Le Monde Diplomatique" dice que la nacionalización de la banca es un fenómeno único en la historia
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El director de la edición en castellano de "Le Monde Diplomatique", Ignacio Ramonet, afirmó hoy en Madrid que el hecho de que los dirigentes de EEUU, Reino Unido, Francia o Luxemburgo estén nacionalizando bancos "es un fenómeno único en la historia; están haciendo lo que ni siquiera Lenin se atrevió a hacer".
"Ahora los dirigentes liberales a cargo de los países que están viviendo este seísmo económico están adoptando medidas que van incluso en contra de sus principios", manifestó.
Ramonet hizo estas declaraciones en el marco del Congreso "Familias y Globalización", organizado por la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción (FAD) y el Ministerio de Educación, Política Social y Deporte, donde analizó las claves que han conducido a la actual crisis financiera, que calificó como "el saldo de un cuarto de siglo de neoliberalismo".
En su opinión, en este mes han pasado muchas cosas que afectan directamente a la globalización y que van a tener consecuencias en la vida real de las familias. La situación actual marca, a su juicio, "el fin de un modelo: el de una economía basada en el consumismo desenfrenado".
Para Ramonet, "la crisis actual ha puesto fin a esa globalización, de carácter neoliberal", que ha durado desde finales de los años 70 hasta hoy.
Según explicó, la crisis surgió a la sombra de una propuesta neoliberal que preconizaba como objetivo vital ganar lo más posible en el menor tiempo posible, hasta el punto de que muchos analistas asumieron que el sistema económico "literalmente se había vuelto loco", porque los mercados se comportaban de manera irracional.
Como consecuencia, "la ideología de la globalización del neoliberalismo está en este momento interrogándose sobre su eficacia", porque hoy en día "los críticos más severos de la globalización curiosamente son aquéllos que hasta hace poco tiempo nos la describían como una verdadera solución milagrosa".
Agregó que el hecho de que el capitalismo sufra una crisis no es nada excepcional, porque, dijo, cada 10 ó 12 años éstas se reproducen. No obstante, comentó, "este tipo de situación actual sólo se produce una vez por siglo. La única comparación de la crisis actual es la del crack del 29", por sus repercusiones sociales y políticas.
ORÍGENES Y CONSECUENCIAS
Indicó que esta crisis financiera comenzó en Estados Unidos, en agosto de 2007, con la morosidad de las hipotecas de mala calidad ("subprime"), lo que hizo estallar la burbuja financiera y ha terminado por tener un impacto en la economía real, extendiéndose por todo el mundo a otros activos, como el crédito a empresas, el crédito al consumo y el crédito inmobiliario, lo que se asemeja "a una epidemia fulminante imposible de atajar".
Según Ramonet, muchos sectores van a reducir su nivel de actividad y se teme que la situación desemboque en una depresión, aunque por el momento lo más ajustado es hablar de "recesión", por lo que es "innegable la necesidad de que el Estado venga ahora con fuerza a imponer reglas y controles para que los mercados funcionen".
A su juicio, aún se desconoce la auténtica dimensión de la crisis y sus posibles consecuencias políticas y sociales. Como ejemplo, señaló que la reducción del valor en Bolsa de grandes compañías puede hacer atractiva su compra por las "petromonarquías" del Golfo, China o Rusia, con los elementos de incógnita que eso puede generar.
El director de "Le Monde Diplomatique" propuso algunas soluciones, que "ya se están dibujando". Entre ellas, se refirió a una mayor intervención del Estado, "porque las autoridades públicas son las únicas que tienen legitimidad".
Además, criticó que el Banco Central Europeo "no dependa de los dirigentes políticos" y abogó por "la prohibición de los fondos especulativos y los paraísos fiscales".
Ramonet concluyó su intervención proponiendo "aprovechar esta situación para arreglar la deuda externa de los países no desarrollados". "Este sistema hay que modificarlo y para ello es necesario que haya un nuevo acuerdo como el de Bretton Woods, realizado no sólo por los países miembros del G7, sino también por los países del Sur".
Consideró necesario que "el nuevo sistema refleje mejor la realidad del mundo de hoy y ponga término a los avisos económicos de estos años, cuyas víctimas hemos sido los ciudadanos".
(SERVIMEDIA)
14 Oct 2008
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