Fuentes de la compañía indicaron a Servimedia que un empleado de la compañía en Roma, que se encarga del reparto de los envíos postales, detectó un paquete sospechoso remitido desde la sede de Iberia en Milán.

Siguiendo el protocolo de seguridad, el empleado telefoneó a los "carabinieri" romanos, que acudieron a inspeccionar el paquete.

De esta forma, detectaron que el paquete contenía unlibro con un artefacto en su interior, si bien las mismas fuentes no conocían la cantidad de explosivo con la que se elaboró el paquete.

Posteriormente, la policía italiana procedió a la desactivación del paquete de forma controlada. El paquete, según las mismas fuentes, es similar al recibido ayer, desde Italia, en la redacción del periódico "El País" en Barcelona.