El negocio típico de generación de energía de Iberdrola absorbióel año pasado un total de 66.500 millones, de los que 13.100 fueron para instalaciones hidroeléctricas, como las nuevas plantas de Soutelo, en Orense, o de Nuestra Señora de Agavanzal, en Zamora. A ellas se unen los 9.500 millones gastados este año en Ricobayo II, también en Zamora.

Por su parte, las instalaciones nucleares exigieron unas inversiones de 28.000 millones de pesetas, para mejorar equipos y sistemas, y otros 17.900 para la adquisición de combustible, mientras que las plantas térmicas convncionales requirieron unos 2.000 millones. La inversión de I+D para generación sumó 1.750 millones de pesetas.

Para la distribución de energía, los desembolsos realizados por Iberdrola en 1994 ascienden a 36.800 millones de pesetas, sobre todo para los proyectos de ampliación, modernización y mejora del transporte, transformación y redes de distribución de la energía, y cuya finalidad es la mejora del servicio prestado a los clientes.

Las inversiones en redes de media y baja tensión sumaron 16.75 millones de pesetas, mientras que el desarrollo de las redes de distribución de la compañía (líneas y subestaciones de alta tensión) demandaron otros 7.400 millones.