Ambas compañías reunen una infraestructura de fibra óptica de 10.000 kilómetros, y segun sus responsables, se trata de una nueva demostración del estrechamiento de lazos entre los dos grupos, que cuentan ya con cruces de participaciones accionariales.

Iberdrola explota en la actualidad una red de 6.000 kilómetros de fibra óptica, y se encuentra en un proceso de expansión que la situará en 8.000 kilómetros a lo largo del 2001, mientras qe la de EDP alcanza los 3.500.

Las redes de comunicaciones de las dos compañías se han unido mediante interconexiones en las centrales de Cedillo (Cáceres) y Aldeadávila (Salamanca), lo que permite desde el primer momento ofrecerlas como canal alternativo a Telefónica para dirigir llamadas entre Madrid y Lisboa.

Iberdrola calcula que sus inversiones en fibra óptica sumarán unos 23.000 millones de pesetas en el año 2001. y estima que la cifra de negocio con la explotación de dichas redes será e unos 20.000 millones de pesetas anuales.