Según la documentación oficial del País Vasco a la que ha tenido acceso Servimedia, las ayudas han sido distribuidas por la Consejería de Justicia, que viene repartiendo desde hace años estas subvenciones, a pesar de que la Justicia vasca se pronunció en 2005 en contra de estas asignaciones.

En concreto, la Consejería de Justicia ha repartido estas ayudas dentro de una iniciativa destinada a financiar los desplazamentos a cárceles de toda España para visitar a presos vascos, que son en su práctica totalidad miembros de ETA.

A este respecto, la consejería vasca de Justicia ha aprobado un total de 272 solicitudes de familiares de presos que realizaron, durante 2008, viajes a distintos centros penitenciarios del territorio español.

Las subvenciones concedidas a estos familiares han sido repartidas según un criterio de módulos, pero van desde un mínimo de 257,58 euros a 1.717,20 euros.

Estas ayudas se siguen repartiendo pese a que el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco anuló en abril de 2005 las subvenciones establecidas por el Gobierno Vasco para financiar las visitas de familiares a presos vascos internos en cárceles situadas fuera de la comunidad vasca.

La sentencia del alto tribunal vasco establecía que las ayudas a familiares de presos invaden competencias penitenciarias del Estado, que no han sido transferidas al Gobierno Vasco, a pesar de estar recogidas en el Estatuto de Autonomía.