Estas dos averías, que se suman a la ocurrida ayer en una línea de cercanías de Madrid, han tenido lugar poco antes del inicio de la huelga convocada para hoy por CCOO, CGT y Semaf contra los expedientes abiertos a 90 trabajadores, según la empresa, y más de 130, según los sindicatos, por su presunta implicación en los cortes de vía ocurridos en las huelgas del 8 y 9 de octubre.

La avería de Barcelona se produjo a las 2,45 horas de esta madrugada y fue provocada por el incendio de un arqueta de los sistemas de señalización en la estación de Clot-Aragón, lo que ocasionó desvíos, transbordos y retrasos en varias líneas de cercanías de Barcelona.

La otra avería tuvo lugar en la línea de cercanías que conecta Fuengirola con Málaga, y se produjo al destensarse de forma provocada la catenaria (tendido eléctrico), al faltar los contrapesos que la mantienen tensa. Esto ocasionó la suspensión del servicio desde casi las seis de la mañana hasta pasadas las ocho entre Málaga y Torremolinos,mientras que la reanudación hasta Fuengirola se produjo horas más tarde.

Esta avería fue similar a la que ayer tuvo lugar en Getafe, en Madrid, que también fue un acto de sabotaje, según la compañía. Sin embargo, fuentes sindicales aseguraron hoy a Servimedia que lo de ayer no fue un sabotaje, sino que se debió a un problema de falta de mantenimiento.

Según las fuentes sindicales consultadas, "cuando se está reduciendo el personal en los equipos de conservación, pasan estas averías, que no puedenser achacadas a los trabajadores. Lo que ocurre es que todas las inversiones se derivan hacia la línea de alta velocidad, y las líneas convencionales están medio abandonadas".

Sin embargo, Renfe indicó que, por el momento, desconoce la identidad de los individuos que han provocado estas averías, "aunque es evidente que se trata de personas que conocen profundamente el funcionamiento del ferrocarril". A su juicio, "los saboteadores sabían perfectamente, en el momento de provocar las averías, las consecencias que podían acarrear sus acciones".

La huelga de hoy, que en esta ocasión cuenta con el apoyo de UGT, se desarrollará entre las once horas de hoy, viernes, y las once horas de mañana, sábado, y con ella se pretende presionar a la compañía para que retire los expedientes abiertos a trabajadores por su supuesta participación en actos de sabotaje en las últimas huelgas.