La huelga, que fue aprobada por los trabajadores en una asamblea, afectará al total de trabajadores de este servicio, unos 1.350, que dejarán sin recoger unas 3.000 toneladas de basura acumuladas diariamente en la capital.

Según explicó CCOO, el objetivo de la convocatoria es presionar a la empresa para coneguir negociar el convenio colectivo para el presente año, que en la actualidad, a pesar de haber iniciado las conversaciones hace más de un mes, está paralizado, debido a la "cerrazón de la empresa".

Los trabajadores reclaman, entre otras reivindicaciones, un aumento salarial cercano al 9 por ciento, la reducción de la jornada laboral de 39 a 35 horas semanales, y la participación de los empleados en el servicio médico de la empresa.

Sin embargo, según los sindicatos convocantes del paro, que inegran la Comisión Negociadora del Convenio, Focsa se niega a hablar de estas reividicaciones, limitándose a poner sobre la mesa una subida salarial del 6 por ciento.