Estos incidentes ponen fin a la calma que vivía la localidad en las últimas semanas, tas las revueltas populares que reclamaban la cabecera de la comarca y que obligaron a la Xunta de Galicia a paralizar el proyecto de comarcalización, a la espera de lograr un concenso entre las fuerzas políticas y sociales.

La presencia de numerosos efectivos de la Guardia Civil durante un pleno de la corporación motivó ayer un plante de la oposición y los posteriores incidentes, que concluyeron con la detención de José Díaz Rodríguez, José María Campo y José María Alvarez, que pasaron a disposición jdicial e ingresaron en la prisión de Bonxe.

Por el momento, la villa de Fonsagrada mantiene una tensa calma, aunque los vecinos tienen previstas nuevas reuniones para decidir actos de protestas.