Según han informado a Servimedia portavoces del Ministerio de Fomento, esta es una de las vías que seguirán las autoridades españolas en los próximos días para hacer un seguimiento detallado del conflicto en el país vecino y velar así por los intereses de los transportistas y mercancías españolas que se puedan verse afectados.

Esta medida se suma a las adoptadas en días pasados por el ministo español de Fomento, Rafael Arias-Salgado, con el envío de sendas cartas a su homólogo francés, Jean-Claude Tayssot, y al comisario europeo de Transportes, Neil Kinnock, solicitando toda suerte de medidas que garanticen el libre tránsito y la seguridad de los camioneros españoles y las mercancías a su paso por Francia.

Los responsables de Fomento reiteran que a media mañana del primer día de huelga la situación en las fronteras entre España y Francia de Irún y la Junquera era de absoluta normalidad,que sólo en los numerosos controles y barreras diseminados por el interior del país puede que se estén produciendo aglomeraciones de camiones españoles por la acción de los piquetes.

Para tener constancia de la situación de las carreteras en el país vecino, Tráfico ha facilitado el teléfono de llamada gratuita 900-123505, y los números en territorio francés 07-33-144290429 de la Federación Nacional de Transportistas, y el 07-33-148124444 del Centro Nacional de Información de Tráfico francés.

Aunue las autoridades españolas se apoyan en la normalidad de los tráficos en las fronteras y en el reciente inicio de la huelga francesa para no dar datos de posibles pérdidas, algunas de las organizaciones agrarias ya han dejado ver el posible perjuicio que el conflicto galo puede originar en el campo español.

La Unió de Llauradors y Ramaiders del País Valenciá-COAG prevé unas pérdidas de 2.000 millones de pesetas diarias sólo para el sector de los cítricos, que se encuentra actualmente en plena campañ de producción y exportación. Otras organizaciones del sector, como UTECO, eleva las pérdidas totales que podrían originarse a unos 20.000 millones de pesetas, ya que el suministro semanal de estas frutas a Europa es de unas 150.000 toneladas.