El portavoz matizó que "el hecho de emprender acciones jurídicas contra un Estado es una decisión muy grave, además la carga de la prueba debe determinarla la Comisión, que debe probar que el Estado no ha hecho todo lo posible para impedir los hechos".

"Esta huelga dura desde hace un día y antes de tomar decisión tan grave debemos examinar lo que se hace durante un cierto periodo de tiempo razonable. No excluimos la posibilidad de iniciar acciones jurídicas, pero es algo extremamete grave y no tomaremos una deccisión a la ligera", añadió.

El portavoz recalcó que la Comisión Europea "respeta al cien por cien el derecho a la huelga, pero hay diversas formas de llevar a cabo un paro así sin causar perjuicios significativos al mercado único".

Según explicó, "la Comisión tiene el deber de hacer respetar el Tratado de la Unión firmado por los Estados miembros, que estipula que uno de los principios de la Unión es la libre circulación de personas y mercancías".

El Ejecutiv comunitario mantiene contactos constantes con las autoridades y con los sindicatos de Francia para tratar de buscar una solución al prolema.

Por otra parte, la Comisión ha declarado que apoya la propuesta de Holanda de celebrar un Consejo de Ministros de Transportes extraordinario sobre el asunto de la huelga de transportitas en Francia.