Según indicó Aznar, en el caso del conflicto de os trabajadores del sector de transporte por carretera de Baleares, "el problema es de Antich" (en referencia al presidente regional, el socialista Francesc Antich), mientras que en el caso de los pilotos "el problema es de Iberia".

Aznar considera que las actitudes de los trabajadores de Baleares y la de los pilotos de Iberia "no están fundadas" y mostró su preocupación por las consecuencias de estas actuaciones en la imagen de España.

El presidente del Gobierno ha llamado al sentido de la resposabilidad de los que tienen competencias en estas materias y ha pedido disculpas a las personas afectadas por las huelgas.

Aznar lamentó lo que está ocurriendo, "aunque respnda al derecho legítimo de huelga", ya que están haciendo "un daño grande a este país".