La huelga, que se suma a la llevada a cabo el pasado 16 de marzo en defensa de los derechos económicos y las condiciones laborales de los trabajadores de Justicia, ha sido convocada para protestar por los desalojos "por la fuerza" de los empleados públicos en asambleas celebradas ayer.

Según informó hoy CCOO, el director general de Relaciones con la Administración de Justicia ordenó el desalojo por la fuerza de los empleados públicos que participaban en las asambleas de Zaragoza, Cantabria, Asturias y Logroño, y no autorizó la asamblea de Badajoz.

Para los sindicatos, se trata de "una actuación sin precedentes contra el derecho de reunión". A su juicio, este tipo de actuaciones "cercenan el derecho a la libertad de expresión y reunión que toda democracia debe garantizar, violentan los derechos de los trabajadores y abren el camino para que el empresario, en este caso el Ministerio de Justicia, se intente imponer a los trabajadores utilizando sistemas que son impropios de un Estado de Derecho".

"Si el ministerio pretende con estos métodos coercitivos impedir que los trabajadores defiendan sus derechos con la movilización, ha escogido el peor camino. Con represión, con abusos, con imposición, no van a conseguir torcer nuestra voluntad", declaró Javier Hernández, coordinador del Sector de Justicia de CCOO.

Los sindicatos denuncian que este equipo ministerial sigue sin reconocer las legítimas reivindicaciones de los trabajadores y "utiliza la represión para impedir su legítima defensa", negándose a dialogar y despreciando a los trabajadores.