En un comunicado, las centrales rechazan la privatización de los servicios de la sanidad pública y piden a los trabajadores que participen en la concentración convocada para el próximo jueves en la puerta de la Residencia General.

La convocatoria del concurso de adjudicación del servicio de alimentación fue publicada en el BOE el pasado 13 de enero, hecho que demuetra, a juicio de los sindicatos, el interés por acelerar los plazos para impedir la respuesta de los trabajadores.

Según estos sindicatos, desde el año 1989, en que hubo otro intento de privatizar los servicios alimenticios, se ha dejado que las cocinas se deterioren de manera consciente para justificar su privatización.

La situación actual en que se encuentran las cocinas de este hospital "es caótica: aparataje anticuado, deficientes condiciones higiénicas, hábitat no adecuado, escaso número de ietistas", aseguran las centrales.

Además, los sindicatos exigen que el presupuesto que se necesita para esta reforma, entre 200 y 250 millones, sea dinero público. La contrata, a juicio de UGT y CCOO, no garantiza unas condiciones de calidad y buen servicio.

"Parece ser que la política sanitaria que intenta aplicar el señor gerente, doctor Rivera, se corresponde más con la política de privatización propuesta por el Partido Popular (PP) que con la del partido al que pertenece", señala el comunicao.

Agrega la nota que esta sería una nueva contrata "que habría que añadir a las de limpieza, archivos, mantenimiento, comedor y cafeterías".