EL HOSPITAL DEL AIRE COLABORA EN LA SELECCION DE ASTRONATUAS EUROPEOS

MADRID
SERVIMEDIA

El Hospital del Aire está colaborando con el Centro de Investigacionesy Medicina Aeronáutica (CIMA) en la segunda etapa de selección de candidatos a astronautas de la Administración Europea del Espacio (ESA), según informaron fuentes del Ministerio de Defensa.

Las pruebas médicas comprenden dos etapas que tienen carácter eliminatorio. En la primera de ellas se realiza un cuestionario sobre el historial médico, personal y familiar, que tras ser evaluado por el CIMA determinará los candidatos que han resultado aptos.

La segunda etapa consiste en unas pruebas médicas ue se agrupan en dos fases. La primera de ellas consiste en un reconocimiento médico precedido de una evaluación de la capacidad de equilibrio y de la resistencia frente al mareo, mediante la denominada "silla de Barany".

Esta silla es una especie de peonza humana, situada en una cápsula oscura que da vueltas a derecha e izquierda durante diez minutos.

Otra de las pruebas es el "test de Coriolis", que pone a los aspirantes en una situación similar a la que se vive en estado de ingravidez y que prvoca el llamado mareo espacial.

GRADO DE SOCIABILIDAD

Obtener datos sobre la personalidad de los candidatos y medir su grado de sociabilidad, para descartar los casos que presentaban síntomas fóbicos y neuróticos, fueron los objetivos de los análisis psiquiátricos que les fueron practicados a los aspirantes. También debieron superar análisis de sangre, reconocimientos cardiológicos y oftalmológicos y audiometrías.

Los preseleccionados pasaron a la segunda fase de esta etapa, que se desarrolla e Bretigny (Francia) y cuenta con la colaboración del Hospital del Aire español.

La "prueba centrífuga", la más importante de esta fase, simula la entrada en la atmósfera de una nave espacial y somete a los candidatos a altas aceleraciones, en una especie de desorientador espacial.

Esta fase se completará en Porz Wahn, cerca de Colonia, y en París, con la "cámara de baja presión", "el simulador de vuelo" y la "piscina".

La última prueba se desarrolla en un tanque de más de cuarenta metros de rofundidad lleno de agua, donde los aspirantes, vestidos con el traje espacial, prueban su capacidad de maniobra en estado de ingravidez.

Las pruebas médicas incluyen también análisis hormonales y enzimáticos, estudios radiológicos, oftalmológicos y antropomórficos, evaluaciones odontológicas y test psiquiátricos.

Este elevado número de pruebas y exámenes médicos responde, según el Ministerio de Defensa, a la necesidad de encontrar sujetos "absolutamente normales", en los que no exista ninguna paología latente ni indicios de que se puedan presentar en un futuro próximo.

Asimismo, trata de comprobarse que las especiales situaciones medioambientales a que estarán sometidos los futuros astronautas notendrán una repercusión importante que pueda ocasionarles desequilibrios notables o irreversibles en su fisiología.

La primera etapa ha sido superada por 42 candidatos, de los 126 que se presentaron. De la segunda etapa, que finalizará el 22 de febrero, saldrán los candidatos que tomarán parteen las pruebas definitivas, a celebrar en Porz Wahn el próximo mes de mayo. El objetivo de la Administración española es lograr que al menos uno de los diez futuros astronautas sea español.

(SERVIMEDIA)
18 Feb 1991