Además, según explicó el presidente de esta asociación, Jaime de Sibatte, la medida ayudaría a este sector que está viendo reducida de forma significativa su actividad conmo consecuencia de la crisis de la construcción.

Por ello, pide a las administraciones públicas que se planteen la posibilidad de construir todas las carreteras con hormigón porque, a partir de un precio de 70 dólares el barril, la construcción de carreteras de hormigón resulta más barata en cuanto a mantenimiento y duración, no así en su implementación inicial, frente a las carreteras de aglomerado asfáltico.

Además, destaca que el hormigón no es un producto inflacionario en la medida del petróleo, ya que es un producto nacional, a diferencia del asfalto que hace que España sea dependiente del exterior.

Otro argumento es el ecológico, ya que según Anefhop, el pavimento asfáltico contamina la base de terreno sobre la que se sustenta y el hormigón no.

De hecho, por ley, la construcción de pavimentos en túneles debe ser ya de hormigón, ya que en caso de incendio, el asfalto emite gases extremadamente tóxicos, frente a la inocuidad del hormigón.